6/7/10

Un verano en Granada con Maria


Miguel conoció a María en el bar donde iban a comer al medio día, cuando estuvimos haciendo un trabajo en un pueblo de Granada, habíamos sido enviados a montar los automatismos de una papelera. Desde el primer le gusto la muchacha, era chica morena de ojos grandes pelo negro melena casi hasta la cintura aunque casi siempre lo llevaba recogido.No debía pasar de los treinta años y era muy guapa.Habían pasado diez días, y el trabajo llegaba a su final, era viernes y el domingo teníamos que abandonar el pueblo para volver a Barcelona.Dormíamos en un parador a unos cinco kms del pueblo donde trabajábamos, ese fin de semana eran las fiestas del pueblo, esa noche cuando todos nos fuimos a dormir Miguel con una de las furgonetas que teníamos para desplazarnos al trabajo marcho hacia el pueblo, no dejaba de pensar en María, deseaba poder hablar con ella a solas antes de marchar. Algo en su interior le decía que esa noche la vería, en el pueblo no vivían más de mil habitantes. Sobre las once llegó al recinto ferial, solo había cuatro cacharros, una pista de autochoques, un tío vivo para los mas pequeños y la clásica caseta de tiro, María estaba junto al tío vivo donde estaba montada su hija, una niña morenita como ella de unos 5 años, María era viuda, su marido había muerto hacia unos tres años en un accidente de trafico dejándola con la niña chiquita. Esa noche estaba guapísima, llevaba un vestido de verano ceñido que hacia volar la imaginación mas de lo deseado, tenia unos pechos generosos, erectos y desafiantes, María siempre tenia la sonrisa en los labios, hablar con ella era quedarse embobado escuchándola, su voz era suave, calida y un acento andaluz que la hacia muy graciosa al oírla, se acerco y la saludó, María le devolvió el saludo con una sonrisa, esa noche pasearon por el recinto siempre bajo la mirada de la gente, Miguel era un extraño que estaba de paso en el pueblo verla pasear con el debieron de hacer múltiples comentarios y conjeturas.María se retiro pronto, la niña deba señales de cansancio y tenia sueño, se despidió de Miguel con una sonrisa un adiós y hasta mañana.Al día siguiente solo quedaba recoger las herramientas, se harían las ultimas pruebas y nos despediríamos.Antes de marchar esa noche Miguel le pidió a María volverla a ver al día siguiente por la noche para poder despedirse de ella, María ante la invitación lo miró a los ojos, dudo unos segundos no le dijo ni si ni no, solo mañana hablamos en el bar.El sábado antes del pueblo pasaron por el bar donde iban a comer al medio día, un bar pequeño, de pueblo regentado por una señora mayor llamada Antonia, la mujer durante los días que estuvimos allí se deshizo en atenciones hacia todos nosotros, se la veía buena persona.Antes de salir del bar Miguel entro en la cocina donde estaba María, esperando una respuesta afirmativa a su requerimiento de la noche anterior.María, nos veremos luego? No seee,, ya veremos, la respuesta lo dejo un defraudado, no podía seguir hablando con ella delante de la gente así que algo serio se dijeron adiós y salio del bar..Esa última noche todos teníamos a una cena en un restaurante a la salida del pueblo donde había un tablao flamenco, la pagaba el dueño de la fábrica para todos los trabajadores como final de obra.
CON MARIA 1...

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Miguel esa noche miro de escabullirse les dijo a sus compañeros que iría mas tarde, que tenia que hacer unas compras.Quería cómprale un recuerdo a María y intentar verla de nuevo.Se le hicieron muy largas las horas ese día, deseaba que llegara pronto la noche para volver a ver al pueblo y ver a María.Llevaba mas de una hora esperando ver aparecer a Maria por la feria, pero no aparecía, pasadas las doce viendo que no venia fue al bar de la señora Antonia pensando que podría estar allí, se bebió dos cervezas, fue a pagar y la señora lo invito, cuando salía del local oyó la señora que lo llamaba le hacia señales desde la puerta que daba a la cocina.¿Buscas a María verdad?.Le sorprendió la pregunta, antes de responder la señora se adelantó, esta en su casa, ves a verla, quedó pensativo, ¿no se si debo respondió? Yo creo que a ella le gustaría que lo hicieras, respondió la señora con una sonrisa.Salió del bar, tardó unos minutos en decidir si iría o no, al final el deseo que tenia de volver a verla pudo mas, María vivía en una casa en la otra parte del pueblo de donde estaba la feria, la señora del bar le dio la dirección de la casa, a los pocos minutos divisaba la casa, le entro un tembleque como si las piernas le fallaran, nunca había sentido algo así. Pasó delante de la puerta sin pararse, pasados unos metros se dio la vuelta, miró a ambos lados cuando volvía a estar a la altura la puerta, el ruido de una llave al girar le izo mirar vio que la puerta se habría, dudó unos segundos en entrar o no entrar, al final se decidió, empujo la puerta y entró, María estaba al otro lado de la puerta, con su sonrisa habitual. Ya pensaba que no ibas a venir.María llevaba un vestido fino de tirantes, lo miró sonriendo, llevaba el pelo húmedo de haberse duchado hacia poco. Al verte pasar de largo pensé que no sabias cual era mi casa. He Dudado si debía o no debía entrar. ¿Por qué me interrogaba? Porque mañana va saber todo el pueblo que he estado en tu casa, te van a criticar. Lo seguía mirando con una sonrisa. La señora Antonia lo sabe. Siii ¿ y quee? Pues que puede contarlo. La Antonia no va a contar nada. ¿Y como puedes estar segura de eso? Porque ha sido ella la que me ha convencido, me ha dicho que si me apetecía verte que lo hiera hache. En el pueblo nos vería todo el mundo hablando. Antonia es mi mejor amiga, la que mas me ayudó cuando falleció mi marido, me quiere como una hija tengo mucha confianza en ella, se lo he contado todo, se que no dirá nada ¿todoo? Que me habías pedido vernos, seguía sonriendo. VEN. La seguí, me llevo hasta la habitación donde dormía la niña placidamente encima de la cama, la ternura de su mirada me estremeció.Cerro la puerta me invito si me apetecía beber algo. ¿Quieres una cerveza?. Vale, mientras cogia la cerveza de la nevera observe su cuerpo, bajo el vestido llevaba poco mas, tenia un cuerpo bonito muy bien proporcionado cosa que no se podía apreciar en el bar, su vestido era fino y dejaba libre la imaginación, sus pechos libres sujetador se mantenían erectos como los de una jovencita, el pelo largo casi hasta la cintura, las hormonas empezaron a hervir dentrote mi y el nerviosismo se empezaba a apoderar de mi, nunca me había sentido así con ninguna de las mujeres con las que había estado antes.Ninguna era como Maria, era una mujer que desprendía algo difícil de explicar con palabras, nos sentamos en la cocina, era amplia como las de los pueblos, una puerta daba a un patio interior, estaba abierta para que pasara el aire. Hablamos de su niña, de su trabajo, del pueblo, me contó cosas de su vida, que empezó a salir con el que fue su marido con 16 años, que no había tenido ningún otro novio, que su marido era buena persona, que siempre la había tratado muy bien, la escuchaba embelesado su voz era tranquila, dulce, relajante y a la vez muy excitante, permanecía sentada delante mirándome a pocos centímetros, podía oír su respiración, el olor de su cuerpo recién duchado, olor agradable que invitaba desear y a imaginar.
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María rompió mis pensamientos. Así te vas mañana. Siii, aunque por ti me gustaría quedarme toda una vida, le dije medio en broma. Después de desayunar saldremos hacia Almería, dejaremos los coches en el aeropuerto y a las nueve y media de la noche cogeremos el vuelo para Barcelona. Mientras le hablaba María me miraba fijamente a los ojos, que debería estar pensando después de haber oído lo que le había dicho, eso me ponía más nervioso.Te he comprado una tontería para que te acuerdes de mi, saque del bolsillo un paquetito donde había un colgante y una pulsera a juego, hacia días que lo había visto en un basar, me gusto y pensé regalaterlo. Espero que te guste.No necesito ningún regalo para acordarme de ti, note en sus gestos que le gustó. Es muy bonito. No tenias que haberme comprado nada. Ya lo se, pero quería hacerlo, quiero que te quedes algo mío, me pareció que quiso decir algo con su mirada pero calló, mas tarde me dijo lo que pensó. Me pidió que le ayudara a abrochárselo al cuello, fue la primera vez que mis manos rozaron su piel, se giro y me dio las gracias, tuve sus labios muy cerca de los míos, tuve que hacer un gran esfuerzo para no atraerla hacia mí y besarla.

Se volvió a sentar enfrente, la mire fijamente. Mejor me voy María. YAA, ¿porque tan pronto?. Será mejor que me vaya. Por qué. Ese porque me sonó como una suplica a que no me fuera. Tarde unos segundos en responder. Porque me gustas mucho Maria y si me quedo un minuto más no respondo de mí, no quiero hacerte daño ni que te quedes con un mal recuerdo mío. María sonrió nuevamente. ¿Te pongo nervioso? No lo sabes bien le respondí, no solo nervioso. María se levanto y vino a sentarse sobre mis piernas me paso una mano por los hombros y mirándome fijamente me dijo. No quiero que te vayas aun. Tú también me gustas a mi mucho. ¿ Porque crees que quería que vinieras a mi casa? Tenia sus pechos a unos pocos centímetros de mi cara, al sentir el calor de su cuerpo sobre mis piernas no pude evitar que en el pantalón empezara a notarse la erección, me sentía algo avergonzado y muy excitado a la vez.Me puse de pie. Maria mejor me voy. Nooo. No quiero que te vayas aun. No te das cuenta como me pones. Miró hacia mi pantalón, y me volvió sonreír, si sigo aquí un minuto mas voy a comerte enterita, huyyyy que miedo jajá jajaja, apreté su cuerpo hacia mi cuerpo, su mirada desprendía el mismo deseo que la mía, fui acercando su boca a mi boca, sentía en mi cara su agitada respiración, como su cuerpo temblaba, la bese suavemente en los labios, la miré a los ojos, volví a besarla esta vez con mas ardor y pasión, mi lengua acariciaba sus labios hasta lograr entre abrirlos, mi lengua penetro en su boca, ella se dejaba hacer, mi lengua busco la suya hasta entrelazarse, las dos en un baile de pasión jugueteaban, mientras la besaba apretaba su cuerpo, María sentía entre sus piernas mi erección, su respiración se aceleraba, mis manos acariciaban su espalda, ella me cojió de la mano tirando de mi. VEN, VAMOS A LA HABITACIÓN, mientras la seguía me quite la camiseta, entramos en la habitación, la cama era grande, volví a besarla un beso largo, apasionado hasta sentir dolor en los labios, el vestido resbalo por su cuerpo hasta el suelo quedó ante mi tan solo con la pequeña braguita que tapaba la entrada de la cueva de mis deseos, me sentía el mas grande de los indianas younss, estaba impaciente por descubrir el tesoro escondido entre sus piernas, un tesoro que nadie había osado profanar en los últimos años, yo estaba a punto de disfrutar del mayor de los tesoros. SUS DESEOS,…
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El pantalón me apretaba, lo desabroche y calló al suelo quedando solo con el slip.Lentamente mientras seguía besando sus labios empuje su cuerpo hasta dejarla sobre la cama, mis labios se posaron en sus pechos haciendo que los pezones sonrosados se erizaran al máximo, mis labios siguieron recorriendo su cuerpo, mis labios tocaron el Sueve pelo de su pubis, pelo negro, abundante, la excitación me desbordaba, sentía el calor de su sexo en mi cara, lentamente seguía besando su cuerpo, la pequeña prenda que le quedaba resbaló hacia sus pies, mis labios y mi lengua buscaron la entrada de la cueva donde guardaba su mayor y mas preciado tesoro, me lo iba a regalara mi, entre jadeos, gemidos grititos de placer pasaron muchos minutos, María había tenido varios orgasmos, había pasado mis labios y mi lengua por donde ella nunca había imaginado pudiera hacerlo nadie, la sentía mojadísima, mi erección estaba al máximo me incorpore y me quite el calzoncillo dejando libre y ante los ojos de María la llave que abriría la puerta de la cueva tan celosamente cerrada, desnudo ante sus ojos, observe su mirada, maravillada, o asustada, mas tarde me dijo que nunca había visto aparte de su marido ningún hombre desnudo que yo no me parecía en nada NADA a su marido.Me puse de rodillas entre sus piernas con la mano cogi la llave que abriría la cerradura de su puerta se la pasaba de atrás adelante despacito hasta llegar a su clítoris, María se mordía los labios, arqueaba su cuerpo hacia arriba suplicando que se la metiera. Muy despacito deje que fuera entrando, que empezara a sentir como la cerradura empezaba a ceder lentamente. Sin prisa fui entrando y saliendo suavemente, el camino estaba libre y resbaladizo por los orgasmos, sentía como la cerradura se resistía a dejarme entrar, cuando había llegado casi al final, la saque, la puse en la entrada y e un golpe se la metí hasta el fondo, sentí como mis testículos se estrellaban en su entrada, De la garganta de María se escapó un grito de placer empezamos un fuera dentro que fué acelerándose poco a poco hasta que no podía aguantar mas le dije que tenia que sacarla que me iba a correr,, noooo nooooo ahora no la saques noo nooo córrete córrete me suplicaba, En esos momentos no era dueño de mi, no pude ir en contra de sus deseos y nos corrimos los dos, después de que los corazones volvieran a latir normal hablamos sobre el tema estaba preocupado por que pudiera quedarse embarazada, ella me tranquilizo diciéndome que la gente de los pueblos saben que hacer para que eso no ocurra que no me preocupara.Eres buen amante, siento no saber mas yo para hacerte disfrutar me decía mientras conversábamos, su mirada era tierna cariñosa su pelo revuelto su cara roja sonrojada, su cuerpo desnudo a mi lado hacia sentirme el mas afortunado de los mortales.Mientras hablábamos seguíamos acariciándonos de nuevo la erección la tenia al máximo, volvimos a hacerlo varias veces mas como si fuera la primera vez, no nos cansábamos queríamos aprovechar los minutos al máximo.Le propuse que fuera ella la que me hiciera el amor, María decía que ella no sabia, con su marido solo lo había hecho estando ella debajo, (el misionero), le ayude a ponerse sobre mi, que con su mano la guiara, lo izo, en unos segundos estaba cabalgando como si lo hubiera hecho siempre, se apretaba hasta sentir como aplastaba mis testículos, se volvió a correr, practicamos otras posturas, (la tijera) (de lado) (la del perrito) esta ultima dijo que le gusto mucho que había sentido un placer diferente.No dejamos que el sueño nos venciera hicimos el amor hasta por la mañana, Maria decía que se sentía adolorida pero feliz que no deseaba que ese momento acabara.El día empezaba a despuntar se oían los gallos cantar, me levante dejando a María adormilada en la cama, me dí una ducha cuando salí María estaba despierta y con los ojos llorosos, me enterneció tanto que estuvieron a punto de saltar de mis ojos también las lagrimas no podíamos hablar, no salían las palabras, María se volvió y se tumbo bocabajo no quería verme marchar la abrace y bese en el cuello en la espalda cuando me iba a levantar para irme se giro me cogio y me tiro sobre la cama, me beso hasta hacerme daño en los labios, me izo un chupetón en el cuello, me dijo eso para que no te olvides nunca de mi y volvió a girase y esconder su cara.Me marche de esa casa ese día feliz y triste con la duda de si esa mujer ha sido la única mujer de la cual me he enamorado.¿¿VERDAD O FANTASIA??Ahí lo dejo,,,,,