Doctora.11

Dejando ante mi vista unas braguitas muy sexys. Mi pene estaba duro como un palo esperando a ver lo que sucedía.Fui bajándole sus braguitas poco a poco,Me moría de ganas de ver su rajita en todo su esplendor. Cuando se deshizo de sus bragas y la contemplé creí que se me salía el corazón del pecho.Aquello no podía ser cierto, siempre había deseado una aventura así la tenía delante de mí desnuda. Aquella rajita tan bien cuidadita y mojada me ponía a cien. Ella se acercó a mí y me desnudó del todo. Se tumbó de espaldas a la cama y estiró de mi mano para que me tumbara a su lado, Yo estaba mas que excitado me moría de ganas de comerme todo su cuerpo, no quería precipitarme. Así que, pasé mi mano por su culito como atrayéndolo hacia mi y ella comprendió mis intenciones. Mi lengua pasaba por alrededor de sus pechos casi sin tocarlos, cosa que la excitaba aún más. Poco a poco me acercaba más y más, primero el interior de sus muslos, luego sus ingles, sus labios mayores… Finalmente, pasé toda mi lengua por su raja hasta llegar al clítoris. Ella, dio un respingo y soltó un gemido de placer. Introduje mi lengua a lo más hondo de su coñito ayudándome de mis dedos mientras ella se retorcía de gusto.
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