9/5/12

LA HIJA DE LA LOLA


 NURIA LA HIJA DE LOLA.
Siempre andaba por el comedor provocando, faldita corta y camiseta ajustada, en nuestra primera charla ya le deje claro que no quería problemas con su madre, ella en vez de recular me provoco diciendo que era un cobarde y que solo me gusta follar con viejas, l sujete del brazo casi hasta hacerle daño.
--Niña tu que coños sabes de mi.
--Se que te estas follando a mi madre, que crees que no se oyen desde mi habitación los gritos que pega mi madre.
Me quede de piedra la muy golfilla nos había estado espiando y sabia que cada noche en la ultima semana visitaba a su madre cuando creía que todos dormían.
Vio en mi cara la mala leche que me había entrado y fue cuando se abrazo a mí rogándome que no le confesara a su madre que lo sabia.
En la otra punta del parque estaban sus amigas que no perdían detalle de lo que pasaba entre los dos. Mirándola fijamente le dije que no se lo iba a decir pero que dejara de provocarme y se buscara a otro que yo no quería saber nada con menores, que no me apetecía que me metieran en la trena, y eso es lo que podía pasar si su madre se enteraba que me la follaba.
Era mi ultima noche en el pueblo, al día siguiente recogeríamos las herramientas y marcharíamos para Barcelona. Habíamos quedado en  ir a cenar que pagaba la empresa como final de obra y después tomar unas copas en un disco famosa que había a unos 30 Km.
En la disco nos encontramos con la pandilla del pueblo en la que iban Nuria y sus amigas, la Carola que era la mas mayor y llevaba coche tenia un rolla con mi amigo Miguel y cundo nos vio entrar vino a saludarnos y se fueron juntos a una punta del local, yo me quede en la barra y al verme Nuria se acerco a preguntarme si estaba enfadado con ella, le respondí que no, la verdad es que tenia un cuerpo esplendido para los 17 años que tenia, llevaba una mini falda y una camiseta ajustada y la mayoría de tíos la miraban con deseo, así se lo hice saber y ella me contesto que el único que le gustaría que la mirara con deseo era yo, le respondí que no volviera a insistir que sabia lo que pensaba y que si volvía otra vez por el pueblo y era mayor de edad hablaríamos.
Me convenció para que nos fuéramos a sentar a un sofá, entre copa y copa nos empezamos a besar aunque le volví a decir quede ahí no pasaríamos ella asintió conformándose, bueno eso es lo que yo pensaba.
Habíamos estado en varios sitios y eran ya las tres pasadas cuando las chicas dijeron que tenían que volver al pueblo. Carola tubo la idea de que ella se iría en su coche con miguel y yo me llevara a Nuria en la hurgona del trabajo que era el modo de transporte que tenia, Miguel ya Melo había pedido antes a solas que quería irse solo con Carola para mojar esa noche ya que hasta ese momento no había tenido oportunidad de hacerlo y era la ultima noche así que aunque la idea no me sedujo mucho tendría que cargar con la niña que además iba un poco cargada, bueno también yo esa noche había bebido un poco mas de lo normal.
Estábamos a tres Km. del pueblo cuando Nuria me pidió que entrara por un camino que llevaba al río que quería refrescarse antes de llegar para que su madre no le notara que iba algo bebida.

Nos empezamos a besar, y nos fuimos quitando la ropa mutuamente, me encantó la braguita tan sexy que llevaba, nos quedamos los dos en ropa interior y nos miramos, fui acariciando los pechos por encima del sujetador, luego bajé mi mano y la metí entre sus braguitas hasta tocar  su rajita, mientras la mordía los pezones y le tocaba el coño, bajo la braguita negra tan sexy que llevaba, estaba empezado a humedecerse, ella me tocaba la polla por encima de los bóxer, la verdad es que estaba totalmente empalmado.
Yo le metí dos dedos por dentro de su braguita y empecé a acariciarle el clítoris, ya estaba bien mojada, luego le metí un dedo dentro del coño, estaba muy excitada y mojando las braguitas, note lo estrechito que lo tenia, la tumbe en la hierva y me puse a comérselo con la braguita puesta aun, de un tiron se las rompí oyendo como ella exclamaba un gemido de placer al sentir el tiron
Ella, me desabrochó los bóxer y empezó a tocármela, mientras yo la metía la lengua en su coñito mojado, me di la vuelta quedando en posición del 69 y le empecé a meter a la vez un dedito, ella me la chupaba con ganas aunque casi no le cabía en la boca, me estaba poniendo cachondísimo y no pensaba lo que estaba haciendo, los dos teníamos ganas de follar, se nos notaba, le chorreaba mi saliva y sus jugos por los muslos, yo además, estaba encantado de comérselo, me gustaba su sabor de niña virgen lo tenia casi depilado y daba gusto comérselo, estaba muy excitado y sin avisarle me corrí en su boca, no tuvo más remedio que tragárselo.
Eso la excitó aun mas, porque se empezó a convulsionar y se corrió en mi boca, yo absorbí los jugos y me giré, para darle un morreo y mezclar nuestros flujos y a la vez, la pasé bien la lengua por su chochito para secárselo, para que estuviera luego bien mojadita.
Nos bañamos entre rías besos y abrazos, ya no iba a poder evitarlo me la iba a follar no tenia preservativo yeso me parecía peligrosos pero no podia parar, ella se abrió de piernas y yo me puse encima, se la empecé a restregar antes de apuntar con el capullo en la entrada de su estrecha y virgen rajita y empecé a apretar y meter con cuidado, ella se quejaba y me decía que la dolía, al meterle la punta, por lo que seguí apretando con mucho cuidado, se la fui metiendo poquito a poquito, solo la mitad mi polla media casi veinte cm, así estuvimos un ratito sin moverme, me dijo que no se la sacase, que aunque le dolía quería sentirla toda dentro.

Le dije abriera bien las piernas para que entrara y no le doliera mucho, aunque sabia que aun faltaba lo peor, atravesar el virgo, sentía como la polla topaba en sus himen, empecé un mete y saca poquito a poco, la tenia dentro solo la mitad, ella me agarraba con su mano del brazo y me decía con cuidado, yo iba despacito, se la estaba metiendo y sacando poco a poco, cada vez la iba un poco más rápido, notaba como de ahí no pasaba.
Ella me decía, ten cuidado, se la notaba con miedo, sin que ella lo esperara pegué un apretón y entró casi toda, Nuria pegó un grito que se debió oír casi en el pueblo, había entrado toda, había perdido la virginidad que tanto anhelaba, yo estaba mas que excitado, empecé a moverme primero despacio y aumentando cada ves más rápido, ella empezaba a gemir de gusto, sabia que no iba a aguantar mucho que me iba a correr pronto, bajé el ritmo para retrazar la eyaculacion para que ella se corriera conmigo, empezó a gemir mas fuerte y yo empecé a moverme mas deprisa, me corrí dentro de su coñito, mientras ella jadeaba, corriéndose a lo bestia y pidiéndome mas masss que no parara.
Cuando le saqué la polla, salió junto al semen con un poco de sangre, aunque estaba adolorida me dijo que se había corrido de una forma diferente a cuando se masturbaba en la ducha, que había tenido una sensación muy placentera y me dio las gracias por ser yo quien le quitara la virginidad, luego nos lavamos en el río y mientras lo hacíamos me decía que nunca había visto una polla tan gorda y tal larga, repregunte que cuantas había visto y me respondió que algunas en el instituto pero que ni de lejos ninguna era como la mía y en plan de broma decía que le había destrozado el chocho y se reía con algún gestote dolor, después nos vestimos y  nos fuimos, entramos sin hacer ruido para que no se despertase la madre. Bueno, pues esta es una historia, real como la vida misma.
Al final la niña se salio con la suya y me hizo pasar a mi los siguientes meses  con miedo por si se hubiera podido quedar embarazada.
A los tres años volví por el pueblo a hacer una instalación de una nueva maquina, Nuria estaba estudiando en la universidad y no pude verla no así a la señora Lola con la cual volví a pasar unas noche inolvidables.

No hay comentarios:

Publicar un comentario